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Yo te veo, y sonrío. Porque tu sufrimiento ya lo viví, y sé que se supera.
Yo te leo, y te entiendo, porque sufrí esa confusión que tus palabras manifiestan.
Yo te escribo, y te abrazo, porque en las largas noches soñé ser abrazado, y muchas veces, el abrazo no llego·
Yo te observo, y en tu sonrisa esta mi recompensa.
Y en tu amor, esta mi amor.
Y yo escribo, porque escribir fue mi camino, y es el espacio donde libero mis emociones, donde dejo que mi ser fluya, para que la esencia que YO SOY se manifieste, aquí, y ahora.
Y yo observo, porque desde la observación aprendí a ver lo que el universo me muestra.
Y escucho, porque al escuchar al silencio, escuche mi propia voz.
Y siento, porque siento lo que percibo, y esa percepción se plasma en quién soy.
Y respiro, porque sé que respirando regreso a la luz, purifico mi cuerpo, calmo mi mente. Vuelvo a mi ser.
Y camino.
Y vivo.
Porque sé que vivir, se vive viviendo.
Ale Flores
27 de Julio de 2012
La Merecida
En la cama.
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